Aphonnic

EL TRIUNFO DE LA DETERMINACIÓN

Se acerca la Navidad y, como cada año, se agolpan los viejos y nuevos clásicos de la época: el anuncio de la Lotería, la campaña de ‘Vivamos como galegos’, las compras, el encendido del alumbrado… y el concierto de fin de temporada de Aphonnic en Vigo. Será el 24 de noviembre en la sala Masterclub, con los vallisoletanos Sinaia abriendo fuego. “Podéis ver las luces -que se encienden esa tarde- y luego venir al bolo”, invita Iago González, guitarrista, que promete una actuación especial, más prolongada que de costumbre. Pero, aunque ya trabajan en temas nuevos, este no será el fin de gira de Indomables, el disco que les ha llevado a festivales como el Download o el Resurrection.

Aphonnic cumple este 2018 la mayoría de edad, una excusa como otra cualquiera para echar la vista atrás y hablar también sobre sus planes de futuro. Un tiempo en el que, además de haber caducado la etiqueta nu metal que les colocaron en sus inicios, se han convertido, probablemente, en la banda gallega de metal con más repercusión fuera del Padornelo. Hay una palabra que lo explica. “Si no hubiéramos tenido determinación el grupo no existiría desde hace tiempo. Ahora todo es bonito, pero el camino hubo que hacerlo”, sentencia Iago. Un poco antes, su compañero a las baquetas, Alejandro Alonso, Alen, había utilizado el mismo sustantivo: “No considero que seamos unos fuera de serie tocando, simplemente tenemos determinación. Es lo que nos diferencia: tener los objetivos muy claros, constancia, mucho curro. Y el resto es suerte, estar en el momento adecuado y en el sitio adecuado”.

Conviene acotar los términos del “todo es bonito”. Aphonnic recaudó unos 17.000 euros a través de un proyecto de crowdfunding apoyado por entre 400 y 500 personas para hacer de Indomables el producto de calidad que ambicionaban. Después de eso llevan más de 50 fechas presentándolo, algunas de ellas en festivales tan relevantes como los comentados arriba, y seguirán en ello los próximos meses. Pero no, no se están forrando. “Después de 13 años que llevo en el grupo nadie se ha llevado un céntimo para casa. Todo lo que se gana es para reinvertir”, comenta el guitarrista, que entró en la banda en 2005, cuando tenían un disco en el mercado. Podrían hacer una mezcla pagándole “1.000 euros a un colega”, pero el resultado no estaría al nivel al que aspiran.

Aphonnic, actitud también para cruzar el Casco Vello de Vigo | Ricardo Grobas
Aphonnic, actitud también para cruzar el Casco Vello de Vigo | Ricardo Grobas
Aphonnic mantiene su formación actual desde que a finales de 2012 dejó el grupo el teclista, Felipe | Ricardo Grobas
Aphonnic mantiene su formación actual desde que a finales de 2012 dejó el grupo el teclista, Felipe | Ricardo Grobas

Es ese nivel de compromiso en todos los aspectos es el que, en parte, les llevó a no buscar a un sustituto para el teclista Felipe Alonso, en la banda desde su formación en 2000, cuando lo dejó a finales de 2012, después de grabar Héroes. Y eso que la aportación de ese instrumento siempre ha sido uno de los elementos distintivos del sonido Aphonnic.

Iago: Se habló de buscar a otro. Pero Felipe tenía un nivel técnico muy alto, no era un músico sencillo de sustituir. Por otro lado, encontrar a alguien que esté a un nivel de implicación tan alto como estamos el resto, tanto económicamente como de tiempo, era complicado. Como Alen siempre tocó con claqueta nos pareció que lo mejor era llevar disparada la parte de programaciones. Creo que acertamos porque se mantuvo la dinámica del grupo.

Alen: Nos conocemos desde hace mucho, nos llevamos muy bien. No sabes cómo va a salir el incluir a una persona de fuera.

Iago: Es un matrimonio de cuatro personas.

Como en todos los matrimonios, también entre ellos hay discrepancias. Por ejemplo, sobre la situación de la mujer en la música. Recogemos el guante que nos lanzó Aires la semana pasada y también preguntamos a un grupo solo de hombres por la cuestión feminista. Además, Aphonnic siempre ha sido un grupo atento a la voz de la calle y, de hecho, tienen una canción en la que narran un caso de malos tratos desde la perspectiva de un hijo.

Iago: En el mundo de la música, siempre que ha aparecido una mujer en nuestro entorno se le ha recibido bien, incluso se le valora más porque es mujer. No veo esa desigualdad. Lo que veo es que hay menos mujeres que deciden hacerlo.

Alen: Yo creo que a las chicas en determinadas cosas se les va a exigir mucho más. Yo estoy por la igualdad de oportunidades. Que no le tenga que costar más a una chica que empieza a tocar la guitarra o la batería montar una banda, que no tenga que acarrear encima del hombro las típicas miraditas de los machirulos.

Iago: Yo creo que son más las losas que se imponen. Igual hace 20 años para ponerse a tocar la batería tenías que tener mucha determinación como mujer para querer hacerlo. Es más la losa que se impone la propia persona que no que el entorno le influya en sí.

Alen: Yo ahí no estoy de acuerdo. Creo que el entorno es muy jodido. A las tías muchas veces se les tiene muy encasilladas; tienen que hacer esto, tiene que ser así.

La música de Vigo, en seis preguntas

Tu grupo/artista de Vigo favorito:

Alen: Aphonnic.

Chechu: Dreams of Dolly Sheep.

Iago: Nazca.

Richy: No tengo ningún artista favorito, ni de Vigo ni en general.

Un sitio para tocar en Vigo:

Alen: Castrelos.

Chechu: Castrelos.

Iago: El muelle de trasatlánticos.

Richy: Sala Masterclub.

El mejor concierto de Castrelos:

Alen: The Offspring.

Chechu: Kannon + The Offspring.

Iago: Prodigy.

Richy: Aphonnic + Anthrax.

Un grupo/artista de Vigo al que reivindicar

Alen: Stasia Momento.

Chechu: The Soul Jacket merecen todo e máis.

Iago: Cualquier grupo en el que sus miembros tengan menos de 25 años, somos expertos en reconocer tarde el talento.

Richy: No estoy al tanto del reconocimiento que tiene cada grupo/artista de Vigo. Pienso que es algo que cada grupo/artista se lo tiene que trabajar y, a partir de ahí, llega.

The next big thing de la escena viguesa

Alen: Kings of the Beach.

Chechu: Fascistas fóra da nosa cidade.

Iago: El concierto de Aphonnic en la Sala Masterclub el 24/11, que casualmente coincide con el encendido de las luces de Navidad. Pack completo 🙂

Richy: –

¿Qué opináis de la escena musical en Vigo?

Alen: Hay mucho nivel. Mucha gente tocando. Muchos grupos. Pero por desgracia pocos se arriesgan a salir más allá de esta ciudad.

Chechu: Incrible; calidade e cantidade.

Iago: Siempre viva y con muchos buenos exponentes en todos los estilos, aunque son pocos los que consiguen traspasar sus fronteras, ya sea por falta de apoyo o por decisión/posibilidades del propio artista.

Richy: Siempre ha habido una buena escena en Vigo, aunque nos sigue haciendo falta una sala de conciertos con buena capacidad en nuestra ciudad.

Quién es quién

chechu

Jesús Sanjuan, cantante y letrista

Jesús Sanjuan, Chechu, empezó en la música con 20 años, con la banda Zurrumalla. Tras cinco años en activo se unió a O Pequeno Baltimore, donde conoció a la sección rítmica de Aphonnic, Alen y Richy. «O Pequeno Baltimore fue un gran ejemplo de cómo no debe funcionar un grupo y fue de gran ayuda para no cometer esos mismos errores», comenta Chechu.

Tras la mala experiencia abandonó la música durante un tiempo «por no saber cantar y por falta de confianza en uno mismo». Hasta que Alen y Richy le convencieron para montar Aphonnic. «Doy gracias todos los días por ello». «Una vez termine esto terminará mi andadura por el mundo del faranduleo».

Alejandro Alonso, batería y programaciones

Alejandro Alonso, Alen, comenzó a tocar «por pura casualidad» en 1988. Dos años después empieza su primera banda, D’Farra, con la que graba una demo y debuta en directo en el año 1992.

En 1994 formo O Pequeno Baltimore, banda con la que estuvo tocando hasta su disolución en verano de 2000. En ese momento, junto con Chechu y Richy, pone en marcha lo que más tarde pasaría a ser Aphonnic. 

Se dedica a dar clases de iniciación a la batería desde el año 2012.

alejandro alonso
iago

Iago González, guitarrista

Iago González empezó a tocar la batería con 15 años porque la casualidad quiso que su compañero de pupitre, Daniel de Castro -a la sazón baterista de Kannon-, estaba introduciéndose en ese instrumento. En su primera banda, SET, se encargaba de las baquetas, hasta que en 2003 se disolvió el grupo.

En los siguientes dos años se dedicó a tocar de manera informal con colegas, tanto la batería como la guitarra, hasta que se enteró de que Aphonnic buscaba guitarrista. «Los conocía, tenía su disco Silennce y los había visto en directo. De todo lo que existía en Vigo era el grupo más interesante para mí por afinidad musical«. Así que decidió presentarse a las pruebas, pese a que carecía de experiencia en directo a la guitarra. El resto es historia.

Ricardo Martín, bajista

Ricardo Martín, Richy, comenzó en la música estudiando dos años de guitarra en una academia. Pero luego se decidió por el bajo, que también estudió.

Antes de implicarse en Aphonnic, Richy tocó en varias bandas, como Fata Morgana, Slap My Ash y O Pequeno Baltimore, donde coincidió con Chechu y Alen.

ricardo martin

En cuatro notas


Vuelve por Navidad Aphonnic a Vigo en un concierto el próximo sábado, 24 de noviembre, en la Sala Masterclub, para certificar su buen momento. Tras más de dos años girando con ‘Indomables’, la banda gallega de metal más destacada seguirá en la carretera en los próximos meses, pero ya preparan nuevas canciones. “Estamos creciendo, aún no llegamos a nuestro tope. La motivación te empuja a seguir”.